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Verdades difícil de aceptar sobre la oración

Juan 6:53-68  nos cuenta una historia, que a primera parece un revés para el ministerio de Cristo. Juan 6:53-68 (EM) 53 Y Jesús les dijo: --De cierto, de cierto os digo que si no coméis la carne del Hijo del Hombre y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. 54 El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el día final. 55 Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. 56 El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí, y yo en él. 57 Así como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, de la misma manera el que me come también vivirá por mí. 58 Éste es el pan que descendió del cielo. No como los padres que comieron y murieron, el que come de este pan vivirá para siempre. 59 Estas cosas dijo en la sinagoga, cuando enseñaba en Capernaúm. 60 Entonces, al oírlo, muchos de sus discípulos dijeron: --Dura es esta palabra; ¿quién la puede oír? 61 Sabiendo Jesús en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo

Guía para tu oración

Este artículo tiene como objetivo presentarte una referencia rápida a la cual acudir en momentos de reflexión y de oración. Quiero también compartir con ustedes algunas consideraciones que me vienen a mi mente y a mi corazón al reflexionar en los versos Bíblicos presentados aquí: 1. Al entrar en oración, entras en la presencia de Dios; sabes que él te oye y te concede su respuesta si tú oración es acorde con Su voluntad. 2. Dios desea que pases gran cantidad de tiempo hablando con El. Ora en todo momento de ser posible, dando gracias y persistentemente. 3. Dios no desea que estemos en aislamiento. La oración en grupo es poderosa. En ella se conjuga el amor a Dios y el amor al prójimo. Toda la ley expresa en un acto. 4. Somos instrumentos de Dios, El quiere usarnos. Cuando sientes orar por otros estás siendo herramienta del reino de los cielos. 5. Sin fe es imposible agradar a Dios, y esta verdad también aplica a nuestra vida en oración. Al orar cree en lo que no ves y ten confianza en

Derechos adquiridos en el regalo de la oracion

Has sentido alguna vez que tus oraciones no van mas alla de los muros de tu habitacion? Te has preguntado alguna vez que tus oraciones no tienen sentido? No se si estas de acuerdo conmigo, pero a mi me ha sucedido. En ocaciones he sentido que no se si Dios me ha escuchado, o si estoy orando algo que Dios desea, si mis oraciones estan de acuerdo con su voluntad. En ocaciones me he sentido desesperado porque no he visto aun la respuesta a mi oracion. He tenido el privilegio de conocer personas que son testimonios vivos de la fe en Dios. Aquellas personas, ademas de la Palabra de Dios, han sido sustento en ocaciones que he necesitado aliento para continuar orando por algo. La oracion, como todo es un habito. Ya vimos la vez pasada que ademas de ser una conversacion con Dios, la oracion es un proceso de intercesion en las decisiones de Dios. En mi experiencia, y basado en la palabra e Dios, hay un factor clave que todos tienen que tener para realizar una vida exitosa en oracion: Heb

Conociendo a Dios en conversacion

Nuestra segunda area de crecimiento en la cual ahondaremos es en la oracion. Ya hablamos sobre La Palabra, la cual Podemos decir alegoricamente que son cartas que nos dejo nuestro Padre celestial. Ahora nos enfocaremos en la oracion, de acuerdo a lo que nos dicen esas cartas acerca de Dios.    La oracion es la forma verbal (audible y no audible) por la cual conocemos a Dios. Es una interaccion bidireccional en la cual Dios espera no solo que le hablemos sino que tambien le escuchemos. aunque cada quien tiene experiencias diferentes sobre la oracion, mi deseo es que escudrinemos en las cartas que nos dejo Dios, para aprender y entender que es la oracion, como hacerla efectivamente y lo mas importante, su importancia para ti y para mi.   Un primer paso para reflexionar sobre que es la oracion, es entender etimologicamente el significado de la palabra orar en la Biblia. Como hemos mencionado anteriormente, la mayoria del Antiguo Testamento fue escrito en Hebreo, y el Nuevo